miércoles, 12 de mayo de 2010

La Victoria de Samotracia

La Victoria de Samotracia. Obra de Pithókritos de Rodas? Escultura helenística. Hacia 190 a.C. 2,45 m. Museo del Louvre. París

Es una obra original, procedente del Santuario de Cabiros, en Samotracia. Realizada en mármol, en bulto redondo. Elevada sobre la proa de un barco de piedra, formaba un espectacular conjunto escultórico erigido en la cumbre de un santuario rocoso, probablemente con una fuente a sus pies en cuyas aguas se reflejaba.

Tema: Es una Niké o Victoria, representada como una mujer con alas que acaba de posarse con brío sobre la proa de un navío. Aún mantiene las alas desplegadas y sus ropas se arremolinan por el viento marino. La estatua ha perdido la cabeza y los brazos. Viste un fino jitón transparente atado con un nudo bajo el pecho, que presiona la tela. Los infinitos pliegues del ligero vestido fluyen alrededor del cuerpo, se pegan al pecho y vientre, insinúan y realzan las bellas formas redondeadas. Descansa el peso sobre la pierna derecha mientras la izquierda va hacia atrás, en una suave y larga ondulación.

La composición es abierta, las líneas eje de la obra son las diagonales y curvas, que producen desequilibrio. De frente, la figura se retuerce y se abre en las dos largas curvas de las alas. Vista lateralmente, se observa una gran línea diagonal que enlazaría desde la pierna hasta la perdida cabeza. El dinamismo de la composición se completa con las múltiples y delicadas curvas del vestido. El movimiento impetuoso de la niké se expresa en los paños que se agitan y vuelan y en las alas desplegadas hacia los lados y atrás. El escultor ha querido captar el instante en que se posa.

El modelado de las formas está conseguido con gran expresividad. El artista ha sabido expresar a la perfección los efectos del azote del viento sobre el cuerpo de la diosa, con un estudio anatómico de gran habilidad técnica. Delinea con pericia los senos, el vientre y las diferencias de grosor de las piernas. El ligero ropaje, de "paños mojados" adheridos al cuerpo, vela las formas y las carga de sensualidad y misterio, volviendo más hermoso el cuerpo de la Niké. El juego de la luz se acentúa en los plegados, creando violentos contrastes de luz y sombra. La factura de la obra es refinada, virtuosa, bien trabajadas las diferentes texturas (telas, plumaje de las alas, etc).

Estilo: la obra presenta las características del arte helenístico, último periodo de la escultura griega: complicación compositiva, ilusionismo escenográfico, grandiosidad y ruptura de la proporción clásica, realismo, ruptura del equilibrio, gusto por el movimiento, la tensión dramática, sensualidad y belleza, habilidad técnica. El autor se basa en modelos clásicos anteriores, percibiéndose la influencia de Fidias en la técnica de paños mojados, pero es más realista.

Función: destinada a conmemorar una batalla naval en que los rodenses vencieron a Antíoco III de Siria. Simboliza el triunfo.

El escultor y su época: la obra, una de las más bellas del mundo antiguo, se atribuye a Pithócritos, escultor poco conocido de la Escuela de Rodas, una de las principales de la etapa helenística (siglos III-II-I a.C). A ella se deben obras tan famosas como el Coloso de Rodas, una de las siete maravillas de la Antigüedad, y los grupos del Laocoonte y sus hijos y El toro Farnesio.
Tras las conquistas de Alejandro Magno, la cultura griega se difunde y fusiona con la oriental, surgiendo una cultura de gran lujo y refinamiento estético. Es la fase barroca del helenismo, de enorme variedad del gusto: conviven la idealidad y el realismo, la belleza y la deformidad, los temas dramáticos y los cotidianos, representándose todos los estadios del ser humano (de niños a ancianos). Los clientes serían la minoría rica y poderosa de la época.

Imagen cogida de:http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/e/ee/Nike_of_Samothrake_Louvre_Ma2369_n2.jpg